Entrevista en el diario Las Provincias

Kike García: comenzó en el sector inmobiliario a comienzos del 2011, en plena crisis del sector, tras acabar sus estudios de Arquitectura técnica. Estuvo realizando inicialmente labores de captación y de intermediación en compraventas y alquileres. En 2013 dirigía el equipo comercial como responsable de una oficina que pertenecía a una importante franquicia inmobiliaria, consiguiendo en varias ocasiones premios a la mayor facturación de la zona Levante-Aragón. En el 2023 fundó Arrival, una agencia independiente basada en el trato personal y en el servicio integral que puede brindar un agente inmobiliario al cliente durante toda su vida, con el objetivo de ser un referente para la persona en todas las cuestiones que atañen al sector. Arrival es una agencia tanto para el vendedor como para el comprador, así como para arrendadores e inquilinos, que opera en la Comunidad Valenciana.

Carmen Mira: Comenzó en el sector en 2013, habiendo finalizado sus estudios de Relaciones laborales en la Universidad de Alicante, trabajando para una importante franquicia inmobiliaria en la que realizaba labores, inicialmente relacionadas con el arrendamiento de inmuebles, y posteriormente tanto en ventas como en alquileres. Ganó en varias ocasiones el premio a la agente con mayor tramitación de operaciones y facturación de la zona de Levante. En 2023 se incorpora a Arrival.

-¿Qué características debe reunir un buen directivo del sector inmobiliario?

-Un buen directivo del sector debe tener una gran capacidad empática, pues en el día a día nos encontramos con situaciones en las que la ética prima sobre lo económico. No hay que negar que es un negocio, pero en ocasiones las pretensiones monetarias deben dejarse de lado e intentar ayudar a la persona, que puede tener una dificultad a la hora de vender, comprar o alquilar, que condicione gran parte de su vida. La compra de una vivienda es la adquisición más importante que hace una persona en su vida, con lo cual hay que medir bien cada paso. Dejar en nuestras manos una decisión de esta magnitud es una auténtica responsabilidad.

También debe ser una persona con buenas relaciones y que sepa cooperar. Hoy en día la colaboración entre profesionales es importante y poderse apoyar en un hombro confiable llegado el momento, es crucial para conseguir ayudar al cliente. Si le facilitas las cosas, éste te lo agradecerá, y para ello tienes que contar con una buena planificación y organización.

Además, estar al día de la legislación y de sus continuos cambios e implementaciones es vital.

-¿A qué retos se enfrentan las empresas del sector a la hora de captar y retener el talento?

El problema que ha tenido el sector, desde siempre, es que no ha tenido una buena imagen social. Esto, por suerte, a día de hoy ha mejorado, pero aún nos queda mucho por trabajar. Por ello, muchas personas se han iniciado en la profesión con pocas pretensiones y no han visto futuro en ella, abandonándola al poco tiempo. Es cierto que es complicado hacerse un hueco, generar relaciones, aguantar el estrés, etc. No es un sector sencillo, pese a lo que pueda parecer desde fuera, pero es muy gratificante y tiene mucha proyección. Cada día se aprende algo nuevo y al tratar con personas se hace muy ameno.

Las personas más talentosas suelen a menudo ser impacientes. En el sector hay que tener paciencia. En ocasiones, recoges lo que has sembrado al cabo de los años.

Es importante para un directivo que quiere formar a alguien, ponerse en su situación, pues todos hemos empezado con muchos portazos en la cara. Hay que ser paciente, darle oportunidades y ayudarle a superar los miedos.

-El acceso a la vivienda se ha convertido en un problema para muchas personas, ¿qué evolución prevén en el mercado para este 2025?

-La situación es complicada, y en algunos casos dramática, especialmente en la capital. La escasez de oferta es evidente y la demanda abundante. Esto ha hecho que en los últimos 2-3 años muchas personas tengan dificultades reales a la hora de adquirir una vivienda. Y no sólo es una cuestión económica por la excesiva subida de precios, que también, sino que simplemente no hay suficiente para todos.

En nuestro entorno conocemos gente que tiene ahorros y una vida laboral estable, sin embargo las cuotas de las hipotecas superan su endeudamiento máximo o la aportación sigue siendo insuficiente para la compra, algo que no ocurría hace apenas 3 ó 4 años con este tipo de perfiles. Esto queda patente especialmente cuando pretende acceder a la compra una única persona o una familia monoparental. Los salarios medios no están en consonancia con el precio de la vivienda.

La previsión no es buena, pues la demanda sigue en aumento y la oferta sigue reducida. No se prevé una gran entrada de stock a corto plazo, pues los movimientos del gobierno en este sentido están siendo muy lentos, así que me temo que viviremos esta situación durante un periodo extenso.

-Los nuevos modelos de vivienda, coliving, senior living, flex living… ¿cómo están impactando en el mercado?

-Estos nuevos modelos están empezando a ser en muchas ocasiones una necesidad, ante la imposibilidad de independizarse para mucha gente, especialmente de los más jóvenes. Pienso que, si bien a día de hoy no han causado un impacto notable en el mercado hasta ahora, comenzarán a modificar el panorama inmobiliario en los próximos años.

Sin ir más lejos, las últimas medidas adoptadas en la última ley de vivienda del 2023, ya han provocado en muchos casos la reconversión del alquiler tradicional en el de temporada, habitacional o flex living, que le aporta un extra de control al propietario y unos ingresos más elevados. En la otra cara de la moneda está el inquilino, que debe de adaptarse como puede a este nuevo escenario.

-En los últimos años, la digitalización y la sostenibilidad se han abierto paso en el sector, ¿qué ventajas han aportado? ¿Qué retos plantean?

-Alguien me dijo en una ocasión (y me lo siguen diciendo) que si no te adaptabas a la evolución tecnológica, morías, profesionalmente hablando. No estoy del todo de acuerdo con esto. En nuestro caso somos una agencia que se apoya en lo digital, lógicamente, y que aprovecha las nuevas tecnologías porque nos facilitan las cosas y en consecuencia se las facilitan al cliente, pero por suerte, las personas seguimos necesitando de personas. A casi todos nos gusta ir a un banco y poder hablar con alguien de tú a tú para que nos trate de solucionar un problema que tengamos. Esto pasa en compañías telefónicas y prácticamente en todo el sector servicios.

Se debe de aprovechar la tecnología, y hoy en día se pueden hacer cosas maravillosas con ella, pero no hay que dejar de lado al humano, pues en situaciones complejas donde intervenga la moral, será el que tome la mejor decisión.

Sobre la sostenibilidad, es indudable que se está optando por soluciones cada vez más optimizadas y eficientes. El mundo entero tiende a ello y creo que estamos muy concienciados. El sector inmobiliario es uno de los cimientos, y por eso tenemos que ser un referente.